Su obra padece enanismo, porque yo veo en ellas, por muy pequeñas que sean, una gran monumentalidad.
Mario Antolín (Crítico de Arte)
Sus obras de formato monumental (donde el artista se siente cómodo debido a su atracción por los volúmenes sobredimensionados, generando una obsesión por el tamaño y la importancia del volumen) comenzaron a venderse a particulares e instituciones públicas desde muy joven, con lo que actualmente son adornan plazas, rotondas, avenidas, jardines y edificios públicos. Comienza a generar series de colecciones de diferentes orígenes temáticos, tales como; Slave Series, Zooology, Meat Delights y la Psicoerosión más actual basada en temas actuales relacionados con la neurociencia, el cómic, la arquitectura, incluso el Rock. Con un trasfondo clásico como el Renacimiento, el Futurismo italiano, el Constructivismo ruso y el Expresionismo, siempre presentes como seña de identidad en su obra, con materiales como el acero, el hormigón y el colorismo de la resina.
Su obra padece enanismo, porque yo veo en ellas, por muy pequeñas que sean, una gran monumentalidad.
Mario Antolín (Crítico de Arte)
A mí no me duelen prendas proclamar que Jesús G. de la Vega es un escultor de raza. Un escultor que tiene dedos en los ojos y ojos en los dedos. Puedo afirmarlo porque lo he visto murar y lo he visto modelar…
Antonio Martínez Cerezo (Asoc. Internacional de Críticos de Arte)
Jesús G. de la Vega es un joven sabio. Conoce el interior de las cosas y se atreve a meterse dentro. Esa tensa cuerda entre lo que se sabe y la exploración de lo ignoto, es el nervio que recorre toda creación.
Manuel Gutiérrez Aragón (Director de Cine)
No es un artista cómodo, creador de bellezas sin aristas, de torsos relajados, de desnudos sensuales elegancias etéreas, que luchan por robarle su peso a la materia y convertir en sueño la presencia concreta del hueco y del volumen…
Mario Antolín (Critico de Arte)
Introduce el factor tiempo con el movimiento (el espacio ya lo tiene y lo rompe), aspecto que también nos lleva a la acción mantenida o preparada de los grandes clásicos manieristas, y aún antes la del tiempo. De la Vega es una tensión de marcado carácter expresivo que hace dominar por completo a cada pieza.
Salvador Carretero (Directo del Museo de Arte de Santander)